Por: Yael Maldonado
Entre el 6 y 16 de junio de este año tuvo lugar la Conferencia Interanual Sobre Cambio Climático en Bonn, Alemania. Esta ciudad es la sede de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC); comúnmente en ella se celebra una conferencia anual para dar seguimiento a los trabajos realizados dentro del marco de la CMNUCC.
La conferencia de Bonn fue la primera reunión de los países firmantes de la CMNUCC desde la COP 26, celebrada en noviembre de 2021 en Glasgow, Escocia, en la que los gobiernos acordaron una serie de medidas para preparar el camino a la plena aplicación del Acuerdo de París (2015).
¿Cuál es la importancia de la conferencia de Bonn?
En esta reunión los países miembros trabajaron durante dos semanas sobre las bases técnicas para la siguiente Conferencia de las Partes (COP), que será la número 27 desde la entrada en vigor de la CMNUCC, en marzo de 1994. La COP 27 se llevará a cabo en la ciudad egipcia de Sharm El-Sheikh, en noviembre de este año.
Teniendo como base los mandatos y objetivos planteados durante la COP 26, en Bonn se trabajaron importantes cuestiones técnicas para preparar las decisiones que se tomarán durante la COP 27. Además de la preparación técnica y documental que se trabaja durante esta reunión anual, la misma sirve como un adelanto de la agenda que los países intentarán impulsar durante la siguiente COP.
Este año, la discusión se centró en la movilización de recursos financieros para hacer frente a las causas y efectos del calentamiento global. Sobre las negociaciones en Bonn estuvo presente la sombra de una promesa incumplida: Los países desarrollados no han iniciado con el compromiso de transferir 100 mil millones de dólares anuales hacia los países en desarrollo para ayudarlos a cumplir con su agenda climática.
Es cierto que durante la conferencia no se lograron grandes avances en esta materia, sin embargo, las negociaciones en Bonn fueron un adelanto de la agenda que los países en vías de desarrollo intentarán impulsar durante la siguiente COP.
Si bien esta reunión no tiene el rango de una COP ni cuenta con la asistencia de líderes de estado o una gran cantidad de reflectores, el evento es muy importante porque alberga las reuniones de trabajo del Órgano Subsidiario de Asesoramiento Científico y Tecnológico (OSACT).
¿Qué es el OSACT y cuál es su relación con la conferencia de Bonn?
El OSACT es uno de los dos órganos subsidiarios permanentes de la Convención; se encarga de suministrar asesoramiento científico y tecnológico en áreas relacionadas con la CMNUCC, el Protocolo de Kioto y el Acuerdo de París.
Su trabajo es muy importante para cumplir con los objetivos establecidos por los acuerdos mencionados, pues trabaja sobre temas relacionados con los efectos, la vulnerabilidad y la adaptación al cambio climático, promocionando el desarrollo de tecnologías medioambientales y su transferencia hacia los países en vías de desarrollo y aquellos más propensos a sufrir las consecuencias del calentamiento global.
En la conferencia de este año se realizó el 56° periodo de sesiones del OSACT. El órgano alentó a los participantes a reforzar la capacidad de investigación y atender las necesidades en la materia en los países del sur global e insulares. También señaló la importancia de la investigación y observación sistemática sobre las causas y efectos del cambio climático.
La agenda en Bonn
En esta ocasión las discusiones se centraron en el apoyo financiero a los países en vías de desarrollo para la reducción de sus emisiones, así como la implementación de medidas de mitigación y adaptación al cambio climático. Entre las discusiones más destacadas de la conferencia podemos mencionar:
- La presentación de los avances en la implementación del programa de trabajo de Nairobi sobre los efectos, la vulnerabilidad y la adaptación al cambio climático.
- Asuntos relacionados con la red de Santiago en el marco del Mecanismo Internacional de Varsovia para las Pérdidas y los Daños relacionados con las repercusiones del cambio climático.
- ·Asuntos relacionados con el balance mundial de emisiones previsto en el Acuerdo de París; una herramienta diseñada para monitorear el progreso en el cumplimento del Acuerdo que será actualizada cada 5 años y cuyo inicio está previsto para 2023.
- Mecanismos de Cooperación con otros organismos internacionales.
- ·Un adelanto del programa de trabajo de Glasgow (COP26) – Sharm El-Sheikh (COP27).
Pérdidas y daños: la discusión a seguir después de Bonn
Un tema importante para los países del sur global fue la discusión sobre las pérdidas y daños ocasionados por las consecuencias del calentamiento global. Los efectos adversos del cambio climático son cada vez más evidentes, y son los países menos desarrollados quienes están sufriendo las consecuencias inmediatas de este cambio. A nivel mundial, los países desarrollados
producen el 86% de las emisiones de gases de efecto invernadero1, pero son los países en vías de desarrollo los más vulnerables a los cambios negativos provocados por el calentamiento global.
Este es un asunto delicado, pues los fondos para la acción climática que los países del norte global transfieren a sus contrapartes en vías de desarrollo son insuficientes. Además, los países más desarrollados prefieren fortalecer los mecanismos de financiamiento ya existentes para mitigación y adaptación, en lugar de enfocarlos en instrumentos de compensación por pérdidas y daños.
¿Qué se logró en Bonn?
Los progresos logrados en Bonn fueron más bien escasos. La discusión entre los países en vías de desarrollo y desarrollados se centró en la necesidad de aumentar los fondos para la mitigación, pero los primeros, además, reclaman la necesidad de aumentar el financiamiento a mecanismos de adaptación y considerar instrumentos de compensación por las pérdidas y daños a consecuencia del calentamiento global.
La crisis climática se agudiza cada vez más, sin embargo, no es claro el compromiso de los países con la agenda climática global. Es necesario que los gobiernos nacionales demuestren tener la capacidad para entender el problema al que nos enfrentamos y trabajar para acelerar el cumplimiento de los objetivos de la agenda climática.
Fuente: Global inequalities in CO₂ emissions – Our World in Data